Di Tella en los medios
Clarín
17/10/24

El ajuste en Educación fue del 40% y es el más grande de los últimos años

Mariano Narodowski, director del Área de Educación UTDT y exministro de Educación de la CABA, fue consultado sobre el presupuesto educativo en Argentina.


Marcha de las velas. Reclamo de estudiantes y profesores universitarios contra el ajuste, este miércoles en el Palacio Pizzurno. Foto Marcelo Carroll


La inversión que el Estado nacional hace en Educación está sufriendo uno de los ajustes más grandes de los últimos años. El recorte fue del 40,2% entre 2023 y 2024: una abrupta caída que llevó la inversión desde el 1,48% del PBI que estaba en 2023 al 0,91% actual. Y para 2025 se viene otro escalón más hacia abajo: caerá al 0,88% del PBI, si se aprueba como está el proyecto de Presupuesto 2025 que envió el presidente Milei al Congreso.

Aquí hace falta una aclaración: la Nación invierte el 25% del presupuesto educativo, el resto las provincias, y todavía no se sabe cuánto invertirán. De todos modos, es difícil que, entre todos, lleguen al 6% del PBI al que obliga una ley aprobada en 2006. Aunque de esto el Estado no debería preocuparse porque el proyecto de Presupuesto, en uno de sus artículos, suspende esa obligación por un año.





En términos reales (no porcentajes del PBI), el Presupuesto 2025 estipula que la inversión en “la función educación y cultura” (es decir, todo lo que invierte el Estado nacional en el área) subirá 0,65% en 2025, tras la disminución de 40,20% de este año.

Pero aún a esa leve subida hay que tomarla con pinzas, dice el economista Javier Curcio, que aclara que ese 0,65% surge del cálculo que se hace con un presupuesto que prevé una inflación de solo 18,3% en 2025. “Algo improbable”, dice.

Ahora, si se considera la inflación estimada por el Relevamiento de Expectativas del Mercado (REM), en 2025 habría -en rigor- una nueva caída de la inversión educativa real, que sería de otro 6,93%.



Marcha de las velas. Reclamo de estudiantes y profesores universitarios contra el ajuste, este miércoles en el Palacio Pizzurno. Foto Marcelo Carroll

Curcio es coautor de un nuevo informe del Observatorio de Argentinos por la Educación, de donde salen todas estas cifras.

Para los sueldos de los profesores universitarios -que se llevan el 90% de la inversión del sistema de universidades nacionales- no hay buenas noticias. Tras una caída del 30% este año, habrá una recuperación de solo 2% en 2025, según el informe del Observatorio.

Las universidades -que aparece en las partidas como "Desarrollo de la Educación Superior- seguirán siendo la principal inversión (66,5%) de la Secretaría de Educación, seguida por el nuevo Plan Nacional por la Alfabetización, que se llevará el 11,6%.




El Plan Conectar Igualdad (entrega de computadoras) que este año tuvo un recorte de 71%, el año que viene desaparecerá.

El único programa educativo que este año no se ajustó (+15%) fue el de “Gestión Educativa y Políticas Socioeducativas”, donde están los vouchers para sostener a las familias dentro de las escuelas privadas. Es el otro que crecerá (en 14%) el año que viene.

Clarín le pregunto a Curcio si, introduciendo cambios y sin afectar el equilibrio fiscal, se puede recuperar lo perdido en educación este año, y de dónde tendrían que salir los recursos en ese caso.

“Lo veo muy difícil. El nivel de ajuste que aplicaron es salvaje y a este ritmo no se recupera. La forma de recuperar, manteniendo el déficit cero, sería con impuestos altos. Pero bajaron impuestos como el PAIS y Bienes Personales. Si este año no bajaban esos impuestos y mantenían el déficit cero, ahogaban la economía. Pero también la ahogan ajustando a este ritmo. Nada obligaba a ajustar así”, respondió Curcio.

Y agregó que “después de ajustar a este ritmo, si los legisladores aceptan el Presupuesto, no van a tener de donde obtener recursos para recuperar en educación”.

“Habrá que esperar que la economía rebote y en algunos años podría revertirse. Mientras tanto achicaron el Estado, que es lo que el presidente dijo que venía a hacer y la gente lo votó”, dijo.


El ajuste por dentro

El trabajo de Curcio, hecho junto a María Sol Alzú y Leyre Sáenz Guillén (del Observatorio de Argentinos por la Educación) hace un minucioso análisis de la inversión educativa.

De allí surge, por ejemplo, que mientras que el ajuste este año impactó en casi todas las áreas del Estado -y en educación fue del 40,2%- hubo dos que tuvieron más financiamiento: Trabajo, (con +115,75%) e Inteligencia, que obtuvo 32,24% más.



Ahora, cuando se observa lo proyectado para 2025, es decir, el plan de gobierno para el año que viene, se ve que hay una mitad de áreas ganadoras y otra mitad perdedoras, con Educación sacando un empate. Con el 0,65% de crecimiento, prácticamente no recupera respecto al año pasado.

Los programas de la Secretaría de Educación que más perdieron fueron el Fonid (-93%), “Fortalecimiento Territorial y Acompañamiento de Organizaciones” (-74%).

Además de Conectar Igualdad, en 2025 también desaparecerán los programas “Fortalecimiento Territorial y Acompañamiento de Organizaciones” y “Mejoramiento de la Calidad Educativa”. Los que quedan, pero más caerán, son Fonid (-72%) y “Fortalecimiento Edilicio de Jardines de Infantes” (-31%).

“Lo que muestran estos datos es que el presupuesto nacional 2025 mantiene las mismas prioridades que en los últimos 40 años: privilegiar a las universidades por sobre el resto del sistema educativo. La gran diferencia es que todo el gasto público se reduce de manera brutal, no solo educación, cumpliendo la promesa electoral del ‘ajuste más grande de la historia de la humanidad’ que votó el pueblo argentino. En ese contexto, la educación se mantiene en los primeros tres puestos en la asignación de recursos”, dice Mariano Narodowski, profesora de la Torcuato Di Tella y exministro de Educación de la Ciudad.

“Los universitarios reaccionan fuertemente contra este ajuste y no está mal. Sería bueno que los más perjudicados (los chicos y las familias de la educación básica) también hicieran oír su voz en plazas y calles”, agregó Narodowski.

Los datos usados para el informe fueron tomados de la Coordinación General de Estudios de Costos del Sistema Educativo (CGECSE) del INDEC y del Presupuesto Abierto publicado por el Ministerio de Economía. Para 2025 se analizó el Proyecto de Ley de Presupuesto enviado al Congreso.

Para indexar a valores constantes, los autores usaron hasta 2023 el IPC del INDEC. Para 2024, la inflación interanual promedio hasta agosto, que fue del 268,01%, más la proyección del Presupuesto 2025, que permite estimar un 215% de inflación promedio para todo el ejercicio. Y para 2025, el Índice de Precios Implícito (IPI), que es del 27,89%, calculado a partir de los datos del Proyecto de Ley 2025.