La inflación se ubica en su nivel más bajo en los últimos 3 años: cómo puede impactar en el índice de pobreza
Martín González Rozada, codirector de la Maestría en Econometría, fue consultado sobre el nivel de pobreza en Argentina.
La inflación marcó en octubre el nivel más bajo en tres años al alcanzar 2,7%. Si bien no se traslada directamente, una reducción en el ritmo de los precios ayuda a bajar el dato de pobreza, que en estimaciones privadas ya empieza a mostrar una moderación desde el 52,9% que difundió el INDEC al primer semestre.
“La pobreza se mueve por tres factores: los ingresos de las familias, la línea de pobreza y la distribución del ingresos. La inflación afecta al segundo punto porque, al bajar, se desacelera la variación de la canasta básica total. Si los salarios y prestaciones no cambian, eso genera una reducción en la tasa de pobreza”, explicó Martín González Rozada, director de la Maestría en Econometría de la Universidad Torcuato Di Tella ( UTDT ).
Según la medición que realizan en ese ámbito académico, la pobreza bajó a 49% en octubre. “Hubo un aumento muy grande de las canastas en el primer trimestre, que no fue acompañado por una variación de los ingresos y por eso llegó el dato llegó a 55%. En el segundo trimestre se empezaron a recuperar un poco los ingresos y cayó la inflación. Eso hizo que la pobreza bajara hasta estar cerca del 50%, por eso el dato promedio fue 52,9%. Ya hubo una primera caída entre los primeros trimestres, que continúa”, explicó González Rozada.
Para el analista de la UTDT , si la inflación sigue desacelerando y los ingresos recuperan, la pobreza podría seguir a la baja hasta llegar a 45% en el último trimestre de 2024. González Rozada explicó que sería un nivel similar al que dejó Alberto Fernández en diciembre de 2023, aunque el dato semestral del INDEC -que promedia los números de los dos trimestres- fue de 41,7%.
A su turno, el economista Juan Manuel Telechea, director de Instituto de Trabajo y Economía de la Fundación Germán Abdala, coincidió en que el dato de pobreza podría mejorar algunos puntos a medida que la inflación baje. Sin embargo, consideró que para que la caída sea más pronunciada se tendría que dar un período en el que los ingresos crezcan por encima de la canasta básica.
Jubilaciones y planes sociales: los desafíos en la distribución del ingreso
Hasta ahora, dentro del universo de trabajadores, los únicos que lograron volver a niveles parecidos a los de noviembre de 2023 son los empleados del sector privado registrado. En cambio, el sector público, los cuentapropistas, los trabajadores informales, los jubilados y quienes reciben planes sociales no tuvieron la misma suerte. Por eso, para Federico Pastrana, director de la consultora CP, el panorama es menos optimista.
“Las jubilaciones llegaron a caer entre 24% y 28% en los primeros meses del nuevo gobierno. Las que más se recuperaron son las prestaciones medias y altas, pero las bajas no, porque tienen el bono congelado. Son muchas personas que viven de lo que consumen y que, si bien tienen una tasa de pobreza más baja, se incrementó muchísimo: se duplicó entre los adultos mayores”, puntualizó.
El otro factor que señaló Pastrana tiene que ver con la heterogeneidad de los planes sociales. El Gobierno duplicó la Asignación Universal por Hijo (AUH) y luego la ató a la inflación, pero al mismo tiempo congeló otros programas, como el Potenciar Trabajo. A partir de esa situación, consideró que la pobreza tiene dificultades para mejorar y que, aún cuando logre bajar algunos puntos, no será en la misma magnitud que se recuperan los salarios del sector privado registrado.
“El gasto oficial en programas sociales cayó entre 18% y 20% real promedio. Entre los salarios públicos y los programas sociales es un ajuste muy grande que está vinculado a la forma que encontró el Gobierno de generar superávit fiscal y que es, entre otras cosas, el ajuste en previsión social y salarios públicos. Ahí hubo un un cambio fuerte en la distribución del ingreso”, cerró.