Andrés Hatum: “Los antilíderes afloran en tiempos de crisis porque el trabajador no se queja”
Andrés Hatum, profesor de la Escuela de Negocios UTDT, fue entrevistado por su reciente publicación “El Antilider, por qué las personas no renuncian a las empresas sino a sus jefes”, un texto en el que analiza la personalidad y los modos de acción de aquellos que tienen empleados a cargo.
El autor, “es una rara avis en este nuevo mundo híbrido: combina el rigor académico en su trabajo en la Universidad Torcuato Di Tella con una muy activa consultoría en empresas —mete las manos en el barro— y una tercera pata de divulgación muy prolífica. Este trípode sostiene una lente única para analizar la actualidad fascinante de los recursos humanos, que enfrentan hoy en día cambios tan dramáticos y disruptivos como los que están sucediendo en el campo de la tecnología. La velocidad que estamos viendo en las modificaciones de consensos en el campo de las relaciones laborales es tan alta como la que observamos con la inteligencia artificial, blockchain, computación cuántica o cualquiera de las denominadas tecnologías exponenciales”, expresa Sebastián Campanario en el prólogo del volumen editado por Vergara.
Lo cierto es que los líderes y sus opuestos abundan en todos los ámbitos de la vida. En diálogo con El Tribuno, Hatum describe sus particularidades y aporta posibles recetas para enfrentarlos.
En tu nuevo libro, reflexionás sobre la figura del antilíder a nivel empresarial, desde la experiencia de tener "un jefe horrible" ¿en qué momento te diste cuenta de que esas situaciones que se reiteraban merecían un análisis minucioso y por qué es importante detectarlas?
Estas situaciones le pasan a todas las personas que tienen una vida corporativa. Yo empecé a pensar este tema luego de que a partir de mi interacción con las empresas me daba cuenta que los problemas más importantes venían de los malos jefes.
¿Creés que este tipo de personas, abunda en las relaciones laborales de la actualidad? si es así, ¿cuáles son sus rasgos más dañinos, tanto para las organizaciones como para los empleados?
Los antilíderes abundan y cuando hay crisis afloran ya que en tiempos de crisis la gente no se queja de los antilíderes y los malos jefes, solo tratan de preservar los empleos. Los malos jefes son dañinos para las organizaciones ya que genera que los talentos y buena gente se vaya a otro lugar. Y es malo para las personas, ya que un mal jefe te enferma.
Afirrmás en el libro que líder y antilíder son las dos caras de una misma moneda ¿cómo es que eso ocurre?
Esto es porque en una misma organización podés encontrar áreas manejadas por gente maravillosa y te vas a otro departamento y gerencia y es un infierno.
Si pensamos en la familia o la pareja como pequeñas empresas ¿podemos observar antilíderes en estos espacios?, ¿ creés que su comportamiento puede generar erosión vincular o incluso violencia de género?
Los antilíderes están en todos tipos de organizaciones. En las empresas familiares si hay un antilíder es peligroso debido a que no solamente te vas a sentir maltratado, sino que los vínculos familiares se van a ver afectados. Ojo, el antilíder puede ser hombre o mujer, por lo que la violencia puede venir de cualquiera.
Asegurás que la relación entre el líder y sus seguidores no es estática, sino que se da de manera dinámica. Desde tu formación como politólogo ¿qué ejemplos se te ocurren dentro de la historia de nuestro país?
Todos los líderes pueden tener un costado de antilíder. Es como la sombra que uno no quiere ver. Cristina Kirchner debe ser una de las personas más carismáticas de los últimos tiempos, pero es una antilíder narcisista, que se mira a sí misma. Sergio Massa demuestra ser un antilíder cortoplacista, cambiando según lo que a él le parezca; El presidente, Mauricio Macri, tiene un costado de madera emocional, que describe algunas características de antilíderes. Pero sin duda el narcisismo es lo peor que le puede pasar a una persona.
Las personas que trabajan de manera independiente y son sus propios jefes, ¿pueden ser también sus propios antilíderes?
Sí, son aquellos que atentan sobre su propio negocio porque no se dan cuenta lo malos líderes que son. No están exentos de ser antilíderes.
¿Cómo podemos detectar y accionar para revertir la toxicidad de ciertas personas?
Va a depender del tipo de antilíder que tengas en frente. A un antilíder bestial, tenés que tratar de salir de su mira o te pasa por encima; frente al antilíder cortoplacista, tratar de generar resultados que le sirvan; al de madera emocional hay que enseñarle a poder decir las cosas que tiene que decir y que no se guarde nada; pero si te toca un narcisista mejor tenés que irte de esa organización. Para él o ella, sos la nada misma. Una herramienta, un medio para sus fines.