Rapidez vs. resultados escuetos, el nuevo dilema
Según la directora del área de Educación de la UTDT sostiene que los escuetos resultados oficiales del operativo Aprender "confirman lo que ya sabemos: los déficits de aprendizaje son importantes, sobre todo en matemática y en los sectores más vulnerables que concurren a la escuela pública"
El gobierno anuncia los resultados del operativo Aprender en medio del conflicto docente, en pleno paro nacional. Quizá no fue un momento oportuno, porque habilita el uso político de esos resultados.
Los escuetos resultados oficiales confirman lo que ya sabemos: los déficits de aprendizaje son importantes, sobre todo en matemática y en los sectores más vulnerables que concurren a la escuela pública. La baja calidad y la desigualdad educativa continúan. La Argentina realiza operativos de evaluación a través de pruebas estandarizadas desde los años 90, con algunas deficiencias técnicas que se sostienen en el tiempo. Aprender no es una política nueva, ni tampoco lo son los instrumentos en uso, apenas retocados. Hay más continuidad que cambio.
La evaluación de sistemas educativos, y Aprender evalúa eso, es una de las tareas más delicadas del quehacer educativo. Se trata de saber cuál es la capacidad de un sistema para producir aprendizajes, cuánto aprenden los estudiantes y por qué no aprenden lo que no aprenden. Es crítico conocer los factores asociados a los resultados que permitirían entender, por ejemplo, por qué una escuela que atiende al mismo sector socioeconómico obtiene mejores resultados que otra. La información parcial dificulta la comprensión del problema y puede llevar a conclusiones apresuradas y erróneas. ¿Por qué tanto apuro en lanzar resultados incompletos que no alcanzan para definir correctamente el problema? Un problema mal definido o definido a medias es un obstáculo para encontrar soluciones.
La autora es directora de Educación de la UTDT