En los medios

El Cronista
11/03/24

Las polémicas desafían la promesa ‘anticasta' de Milei

Juan Negri, director de las Licenciaturas en Ciencia Política y Gobierno y en Estudios Internacionales, analizó la forma de hacer política del Gobierno.

Por Catalina de Elía

Las últimas polémicas dejaron en entredicho las banderas fundamentales del Gobierno: la falta de recursos y el supuesto ajuste solamente contra la casta.

El escándalo del aumento salarial para los legisladores, el Presidente y sus ministros, sumado al cuestionamiento de Mondino sobre los jubilados, revela cierta desconexión entre el discurso y la realidad gubernamental.

En la órbita del gobierno de Javier Milei, donde los aumentos generan críticas y ciertas declaraciones insensibles reverberan, la polémica se agudiza. La canciller Diana Mondino, durante su aparición en el programa de Mirtha Legrand, generó malestar al cuestionar la concesión de créditos a jubilados, argumentando insensiblemente sobre su esperanza de vida. "Si sos un jubilado, es casi seguro que te vas a morir. Entonces, ¿por qué se están llevando a cabo estas acciones?" expresó. El Presidente Milei -que ya había sido cuestionado por el escándalo del aumento del 30% a Diputados y Senadores que firmaron Martín Menem y Victoria Villarruel- convalidó una aumento salarial del 48% para él y sus ministros, contradiciendo la promesa inicial de poner fin a los privilegios de la casta política.

Aunque Mondino posteriormente alegó haber sido sacada de contexto y Milei afirmó desconocer la medida y rápidamente dio marcha atrás y echó al secretario de Trabajo, Omar Yasin, estos episodios dejaron en entredicho las banderas fundamentales del Gobierno: la falta de recursos y el supuesto ajuste solamente contra la casta. Es que esto sucede en un momento difícil, especialmente para jubilados y las clases sociales más vulnerables.

Hasta el Fondo Monetario Internacional insistió la semana pasada en la importancia de que el ajuste no recaiga en las familias trabajadoras y los más vulnerables y en que se preserve el valor real de las jubilaciones que, según el Iaraf, perdieron un 43% de poder adquisitivo en el primer bimestre del año.

En los próximos días y meses, se vislumbra una recesión que resuena en sectores cruciales como la industria, la construcción y, sobre todo, en el ámbito del consumo. El panorama sugiere un impacto en el empleo, mientras que el inminente aumento de tarifas de servicios públicos añade presión a la situación.

"La actividad económica está teniendo una caída cuyo primer síntoma es el consumo en el mercado interno. Los ingresos de los argentinos pierden poder adquisitivo frente a la variación de precios en la economía hace trece años. Recomponer salarios será difícil porque la prioridad pasará por mantener la plantilla laboral en un período recesivo de la economía" señala a El Cronista Damián Di Pace, director de la consultora Focus Market.

En este turbulento escenario, el gobierno de Milei trazó el objetivo político del Pacto de Mayo y volver a impulsar la Ley Ómnibus, pero la resolución del dilema sobre cómo aliviar la presión fiscal de las provincias sigue siendo esquiva. El Gobierno propone a los gobernadores reintroducir el impuesto a las ganancias con un umbral de $1.500.000 a cambio de respaldo político para avanzar con la nueva Ley Ómnibus. Sin embargo, esta propuesta no convence a varios gobernadores, quienes insisten en la coparticipación del impuesto país y/u otras soluciones para aliviar la presión fiscal.

En este complejo entramado económico y político, el escándalo del aumento salarial para los legisladores, el Presidente y sus ministros, sumado al cuestionamiento de Mondino sobre los jubilados, revela cierta desconexión entre el discurso y la realidad gubernamental.

Según Juan Negri, director de la Carrera de Ciencia Política y Gobierno de la Universidad Torcuato Di Tella, el problema es que el gobierno libertario tiene una visión muy ideologizada en varios de sus planteos. "Ellos piensan que hay un conjunto de ideas y prácticas que hay que llevar adelante sin ningún tipo de atención a las consecuencias sociales de eso. Por ejemplo, el argumento de Mondino de que los jubilados se van a morir más rápido que el resto de la sociedad es innegable desde lo técnico, pero ahí hay una mirada muy fría y calculadora sobre el funcionamiento de las variables demográficas que tiene que ver con miradas muy intelectualizadas y lejos de la sociedad", señala Negri a El Cronista.

En relación a los aumentos salariales en el gobierno de Milei, Negri sostiene que es un error no forzado que puede traerle costos políticos. "Me cuesta creer que Milei no se dio cuenta de que había un decreto de Cristina [Fernández de Kirchner]. Es un traspié con el que le pueden entrar las balas porque contradice el mensaje moral del ‘mileísmo'. En este contexto difícil, hay mucha gente que le cree el mensaje de que está tratando de resolver la crisis pero que quizás siente que mentir con este doble discurso es algo grave", expresa.

El problema no son los aumentos salariales, el problema es el contexto y la constante amenaza de eliminar los privilegios de la casta política que ahora se desvanece frente a las decisiones que favorecen a esa misma casta. Milei tiene a su favor dos cosas: reacciona rápido (polarizó con Cristina y dio marcha atrás rápidamente) y tiene un historial muy conocido de haber donado su sueldo de diputado. Pero, tal como afirmó el historiador económico, Pablo Gerchunoff: "La demagogia moralista tiene un problema. Mejor que no te agarren en un tropiezo...".